miércoles, 20 de agosto de 2008

¿Información?

Me salto el resumen de mi viaje a Tailandia.
Me meto de lleno en el accidente aéreo de Madrid, en los servicios informativos y en su modo de hacer.
Entiendo que una noticia dramática como esta requiera cobertura informativa pero no creo que del tipo que se le da. Justo estaba tomando el café, porque he comido muy tarde, cuando empezaba la desesperantemente lenta y pesada novela vespertina. Y en seguida ha habido un corte por la noticia de un accidente aéreo. Desde ese momento y hasta estas líneas han pasado 3 horas y siguen con lo mismo. Pero de una manera patética. Buscando la imagen más escalofriante, que por suerte no han podido conseguir. Buscando el testimonio de las familias que están destrozadas por la incertidumbre y a su vez la casi certeza de la desgracia, dado el escaso número de supervivientes. Hablando con cualquiera que haya estado cerca para sonsacarle algún comentario morboso del que poder nutrirse durante un buen rato…

Periodista: ¿ha podido usted oír algún comentario de algún superviviente cuando se acercó a la zona del desastre?
Operario: allí no se oían gritos ni nada. Una mujer preguntaba por su hijo, y una señora que creo que era inglesa, porque no le entendía nada, me hablaba y parecía desconcertada. Pero no se oían gritos.

¿Por qué no ponemos cámaras vía satélite que detecten los desastres y comiencen a grabar para no perder detalle? ¿Tenemos que insistir tanto para hacernos cargo de la magnitud de una tragedia? ¿Es necesario ver los cuerpos calcinados, mutilados, ver el sufrimiento de quien lo padece, la angustia de familias expectantes, conocer los detalles antes que nadie…?
Me parece que la falta de respeto es bestial, la falta de ética en general es espantosa y me aterra. Este mundo en que vivimos necesita mucho amor porque su escasez deja paso a pura aberración. Esto no lo digo sólo por el accidente, ni por las guerras abiertas que existen siempre camuflados los verdaderos motivos, ni por el odio inculcado que permite controlar a la gente.
Es que llevo mucho tiempo centrándome en lo positivo pero… a veces cuesta.

1 comentario:

Diabetes dijo...

A una enseñora que estaba en las Canarias esperando a poder volar hasta Madrid para saber qué había sido de tres sobrinos, o nietos, o algo así (uno de ellos de un año), la han tenido como veinte minutos haciéndoles un poco de reportera: qué cuántos familiares estáis esperando, que de qué nacionalidades, que fíjate lo mal que lo debes de estar pasando, que no sé qué... Yo dudo que me ofreciese a hacer eso en semejante momento, así que quizá en parte también la señora podría haberlos mandado a freír espárragos, o a lo mejor en ese momento le ha parecido bueno dar todos los datos posibles, quién sabe.
Personalmente he apagado la tele y mañana me compraré el periódico, que no grita.

P.D. aparte: Que no apago las velas de verdad, ¿eh?